Estamos obsesionados por airear nuestros hogares, obsesionados por airear toda clase de cotilleos, cuando en realidad lo que más necesitamos es: un soplo de aire matinal sobre nuestros rostros...
El aire es incoloro y a la vez tan sutil que nos ofrece la lección de la pesadez de nuestras vidas humanas...
Intentemos ser ágiles como el viento, transparentes como su consistencia y libres como su propia libertad...
El aire es incoloro y a la vez tan sutil que nos ofrece la lección de la pesadez de nuestras vidas humanas...
Intentemos ser ágiles como el viento, transparentes como su consistencia y libres como su propia libertad...