Hay demasiados niños, que necesitan caricias y sólo pueden abrazarse al viento, en las noches frías...
Hay demasiados hombres, que buscan caminos...
Todos somos culpables de todos los demasiados negativos porque: tal vez somos demasiado avaros en darnos...
Hay demasiados hombres, que buscan caminos...
Todos somos culpables de todos los demasiados negativos porque: tal vez somos demasiado avaros en darnos...