La nostalgia a veces nos visita, se acomoda a nuestro lado y nos canta la canción que un día cantamos y nos enseña los senderos secundarios que no hemos andado y era dónde estaban los paisajes humanos.
La nostalgia es: recordar aquel chiste que nos hizo reír y nos hizo más humanos. Se ha de volver a los senderos secundarios para encontrar a los amigos olvidados; ese que contó aquel chiste y ese otro que nos dio la mano.
Andemos por dónde andemos pensemos y vivamos en positivo porque: las grandes vivencias siempre suceden en los caminos secundarios.