Un ladrón en casa

Hay un arte que, si bien ha estado siempre de moda, ahora tiene múltiples definiciones...Este arte es el arte de robar.
El amor, por ejemplo nos roba el corazón...Y hay ladrones de carne y hueso que desvalijan casas... Pero hay otra clase de ladrones que nos pasan desapercibidos...Dejar la luz encendida, cuando no hace falta o la televisión y el ordenador, que en realidad roban poco o mucho de la economía...El agua es un ladronzuelo muy común en la vida cotidiana...
Pero el peor de los "cacos" quizás sea: el tiempo, que se nos escurre de las manos...
No hay tiempo para una conversación pausada, porque siempre hay algo que nos roba ese tiempo...
Y el tiempo nos quita el saber estar con el marido o los hijos, dando prioridad a otras pequeñeces...En una casa siempre hay un ladrón de turno: el nerviosismo, nos roba la paz, el miedo nos atenaza y la prisa nos deja exagües, el cansancio nos oprime...
Y la larga lista de ladrones no acabaría nunca...

Y no sabía leer

Hay personas come-libros y las hay que no tienen tiempo para leer y sólo algunos subrayan las frases o párrafos más interesantes...Leer es meterse en la trama que el escritor ha elaborado, vivir los paisajes que se describen...
A veces se lee porque no hay otra cosa que hacer, otras porque nos conviene que la gente nos vea como personas cultas, otras por simple curiosidad...
Pero un libro puede ser un fiel compañero de viaje o de vacaciones, puede ser el que nos ayude a dormir, aunque también puede convertirse en un objeto de adorno colocado en una repisa...
Los prospectos médicos mucha gente ni los lee y después nos quejamos del resultado adverso que producen...
Y es que el hombre debería  "saber leer"...

Una cárcel sin rejas

Mi vecino del quinto piso fue encarcelado por un crimen que no había cometido.Era un hombre viejo y con poca movilidad...
Su celda tenía una puerta que daba al mundo exterior, por donde podía entrar y salir a su antojo...
El hombre se sentía tan cómodo entre aquellas cuatro paredes que, ni le pasó por la cabeza usar aquella salida y mucho menos escaparse...En realidad era inocente de lo que le acusaban y le habían hecho un gran favor, pues apenas tenía medios para subsistir, ni siquiera tenía familia y allí donde estaba no tenía que pagar alquiler ni preocuparse por la comida...

A lo largo y ancho del mundo hay muchos seres humanos que viven en una cárcel...Y hay muchas clases de reclusión , desde cárceles con barrotes de oro, pero las que mas abundan no tienen rejas...
Lo peor del hombre anda suelto.
No sé porqué se empeñan en hacinar o coleccionar malhechores...Es imposible echar la mano a todos...
Todos vivimos en una cárcel y tristemente esta cárcel es nuestro mundo.

El castillo

Los antiguos señores feudales vivían en castillos, por donde había que trepar por la montaña para llegar a ellos.Eran verdaderas fortalezas amuralladas de díficil acceso.
El interior de esas moradas eran lugares fríos y oscuros.
No sé como podian vivir esos nobles señores, que además siempre estaban al acecho del ataque de sus enemigos (que no eran pocos). Seguramente no pegaban ojo en toda la noche y cuando enfermaban, el galeno se las veía moradas para llegar hasta allí.
Esos respetables señores debian de tener pocas ilusiones y muy escasa comunicación.Hoy muchos de esos castillos son una ruina.
El hombre de hoy ha levantado en torno suyo verdaderas fortalezas...Se trata del mundo interior de cada uno, de las emociones contenidas, del hermetismo.
Nadie es, lo que es en realidad...
En nuestro castillo vivimos cómodos...Nadie entra, somos una fortaleza en la cima de un monte...
Nuestro mundo es el Yo, el Tu no existe.

Piedras con historia

En todas partes hay piedras (incluidas las de riñón).Ruinas abandonadas, muchas de las cuales han pasado a la historia...Lo que quiero comentar es precisamente el alto precio que hay que pagar sólo para verlas, cuando en el monte gratis las podemos tocar...
En realidad cuando se horada la tierra siempre aparece algo sorprendente: desde un pozo abandonado hasta la zapatilla de su anterior dueño...Pero las piedras siempre serán piedras aunque sean de la época romana
-con perdón de los romanos-.

Muñeca de sal (leyenda budista)

"La muñeca de sal quería saber como era el mar y decidió cumplir su deseo.LLegó a la orilla del mar a la hora del alba y quedó fascinada.Por fin pregunto al mar -Dime, ¿Quién eres?-Soy el mar-¿Y que es el mar?-Soy yo-Explícame, para llegar a entenderlo-Es muy fácil.Tócame y lo entenderás.
La muñeca se animó, avanzó y tocó con el pie aquella masa imponente.Entonces se estremeció...Cuando retiró la pierna vió que los dedos del pie habían desaparecido.Quedó espantada y protestó-¿Qué me has hecho? ¿Qué ha sido de mis dedos?-¿Porqué te quejas?Has ofrecido algo para poder entender¿No querías eso?.Luego la muñeca avanzó decididamente.El agua la iba envolviendo.Cuanto más avanzaba se sentía más disminuida y sentía más la sensación de comprender mejor.Pero aún preguntó-¿Qué es el mar? Por fin una ola se la tragó toda entera.Y en ese mismo instante en que desaparecía, la misma muñeca exclamó:¡Soy yo!"

Amanecer

Este era un ejecutivo con un horario de trabajo muy flexible...Dormía a pierna suelta y se levantaba con el tiempo justo (nunca antes de las nueve de la mañana). Este hombre no habia visto jamás un amanecer...Hasta que un día el sonido del teléfono lo despertó justo cuando amanecía...y fue entonces cuando, a través de la ventana contempló el primer amanecer de su vida...
Todos tenemos grandes y pequeñas posibilidades para descubrir en lo que nos rodea, incluso en los seres humanos grandes sorpresas...La rutina esconde maravillas que pasan desapercibidas...Sólo hace falta: salir al encuentro de ellas ...