Queda patente, el contraste que hay en las formas de pensar...
Iniciar un diálogo es tener siempre oponentes, por lo que hay que aceptar las diferencias y la mejor forma es: callar y analizar las sugerencias de los demás que sean cuales sean, tienen una importancia vital para cada uno...
Tú, puedes tener las ideas muy claras, mientras que las ideas del otro se salen de tu gusto personal, no hay razón para no aceptarlas, porque: en las diferencias personales no hay ni ganadores ni perdedores ya que cada uno se queda con su propia idea...
Lo mejor es: celebrar que cada uno sea como es...