Lo sorprendente

Lo sorprendente no está en la novedad, sino que convive con nosotros en el día a día...
A veces es el estallido de colores que, a la vuelta del camino nos regala una extensa pradera o la grata visita de algún ser querido...
Lo sorprendente es que, apenas demos importancia a esa convivencia continua con lo sorprendente...
Lo más lógico sería vivir embelesado cada minuto de la vida, intentar meterse de lleno en los acontecimientos, en la sencillez de la rutina, porque lo sorprendente está en cada rincón, en cada persona, en cada acontecimiento, en cada paisaje...
Hemos de sacarnos la arena que ciega nuestros ojos para ver lo verdaderamente lo sorprendente...
Cada minuto es una razón única, cada instante nos da el sorprendente regalo de la propia vida...

La conquista del oeste

Hemos nacido para comernos el mundo, para ser dueños de la situación, pero por nosotros van pasando los años sin que podamos conquistar esa gran ciudad que se llama: mundo...
Hay muchas clases de conquistadores, desde atletas y futbolistas, desde escritores y gente anónima...
De estos últimos es sin duda de lo que más abunda...Ellos no han conquistado ninguna medalla, ningun título; pero están ahí, estamos ahí, sólo por el hecho de querer transmitir al mundo el don o los dones de nuestra personalidad...
Ese hombre que cada mañana canta en la ducha, en la casa de al lado, me tiene fascinada. Lo triste es que, sólo seré yo la que lo escuche. Pero a él le es igual, cada día seguirá con su canto y lo que él ignora es que sólo yo soy su público...
Seamos conquistadores y hagamos llegar al mundo aquello de lo que somos poseedores...
Abramos un camino, para que otros puedan seguirnos...

Lo que de verdad importa

Tu eres el creador de tus hondos sufrimientos y angustias...
¿Has buscado soluciones?
En tu corazón hay una mina de oro...
¿Sabes explotarla?
Te falta tiempo para todo pero, aún sigues llenando tu agenda...
Tacha y vuelve a tachar, de manera que sólo quede tu nombre.
A la felicidad hay que atarla fuerte porque es resbaladiza, evanescente y huidiza...
Si miras una y otra vez en el profundo pozo de tu corazón verás que aún queda agua para regar tu aridez...
Busca sin ansia, vive sin prisa, saborea las migajas de felicidad...

Amigo mío

Amigo mio,
andé caminos pensando en ti

y hoy he vuelto para decirte: que soy feliz.

Amigo mío, tiendo este hilo

a lo invisible del cielo azul,

para que mis frases vayan contigo,

dondequiera que vayas tú...

Amigo mío,

atrapé el viento de los caminos,

cogí los sueños de la ilusión

para llevarlos siempre conmigo y compartirlos contigo, amigo,

para que llenen tu corazón.

Entremeses variados

Ahora que me voy una semana de vacaciones, me apetece hablar de la variación.
Lo primero que se me ocurre es la cama, un lugar personalísimo, que no podemos llevarnos...

Los sonidos también tienen su importancia y puestos a decir, diré que, la comida o nos trae por el camino de la amargura o nos pasamos a la idolatría de los menús...

En la variación está la sal de la vida...
Nos conviene cambiar de decorado, cambiar de cama y hasta de comida...
Nos conviene, eso de no hacer nada...Un dejarse llevar por las horas, sentirnos como en una isla desierta...
Nos conviene vaciar el corazón, de vez en cuando...
Saborar más de nosotros mismos que de los entremeses variados.       ¡ Volveré !

                                                                                                 

Dejarse seducir

Aunque la calma del mar nos sedujera, no nos dejemos engañar, porque el mar es traidor...

El silencio de la arboleda también nos puede seducir, pero en sus muchos senderos podemos perdernos...

Aunque los demás sean distintos a nosotros, su corazón late igual que el nuestro...

Nada es lo que parece, todos somos sin distinción caminantes en busca de horizontes...

Caminamos a paso lento...
Ahí tenemos ese cuadro que iniciamos hace años, esperando las ultimas pinceladas de color...
Ese poema que tanto quisimos escribir, sigue intacto en nuestra mente...
Hay que seguir caminando para hallar nuestra propia identidad...
Acabar ese cuadro y poner en nuestro poema aquello que se desborda en nuestro corazón...

El collar

Los seres humanos son propensos ha dejar que les pongan un collar, para así, dejarse arrastrar, o bien por las amistades o modas en uso, tendencias y demás...
Hay quien disfruta no sólo en poner el collar sino también el bozal, para que el hombre cazado guarde silencio...
Y el hombre se deja llevar, allí donde le lleven... La fuerza de voluntad se desvanece, como una nube de primavera...Y con la excusa de que la rutina nos ha dejado desmadejados, nos dejamos hacer...Vamos tras lo insólito, lo peligroso, lo nunca visto...
De nuestro collar pende una correa y nos llevan, ¿Adónde?
Amigos, la libertad es única y nuestras palabras no merecen ser acalladas por un bozal.