Ir a paso lento para tener tiempo de: ver amanecer y ver llover , para escuchar el silencio del atardecer y dejarse sorprender por las primeras estrellas. Al ir a paso lento vamos al encuentro de los sentimientos , que de tanto correr los desconocemos. Todo está ahí, dónde vivimos: la luz del amanecer, la lluvia, el silencio , el ocaso y los sentimientos dormidos, que necesitan ser despertados.
En la vida hay mucho más y no todo es esencial ; añadimos contenidos sin demasiado sentido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario