Nos hemos olvidado, que el instante se cansa de esperar, que nunca se queda en nuestra vida y que siempre huirá. Nos hemos olvidado de, que nuestra vida es una y no existe el plural y que cada momento es solo nuestro tanto para reir como para llorar.
Todo cuanto sentimos nos influye e influimos con los que convivimos y los desconocidos. El instante y el momento tienen mucho que decir, solo hay que estar atentos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario