Mirar a lo lejos es intuir los misterios, tanto de los humanos como del Cosmos, que contienen mensajes ocultos. Estos misterios están también ocultos en la naturaleza, donde nosotros también estamos incluidos y aunque estamos divididos somos los que damos sentido a cuanto nos rodea: El mar, el viento, las montañas, las praderas.
Podemos como humanos sacar conclusiones de que la naturaleza ya no es lo que era y nos de una clara idea de nuestra ceguera e incomprensión del amor...
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