Unos buscan un dios incierto y otros buscan estudiar un libro entero. Los dioses son variados, estáticos y extraños.
Muchos están entre las ruinas de templos abandonados...
Solo el corazón del hombre es: templo sagrado, el que nos da la vida, por el que amamos y somos amados y el que nos da el poder de penetrar en otros templos, que son las otras vidas...
Entremos de puntillas en los templos humanos. Curemos heridas, escuchemos silencios y relatos de vidas sencillas y pongamos amor en las vidas vacías...
Todos somos un templo, nuestro altar es, la vida...
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