La ventana del alma

Me sorprende la variada arquitectura de esa larga hilera de casas, sus colores y tonalidades, sus pequeños o
grandes jardines, pero lo que más me llama la atención son las ventanas...

Tomo conciencia de la gran utilidad que tiene la ventana...Tras ella vemos pasar las estaciones, podemos rozar la lluvía con la punta de los dedos, dejar entrar la luz, que es portadora de bienestar y dejar que los aromas de la primavera saturen el hogar...

De lo que nunca me cansaré es de contemplar esas cortinas y cortinillas multicolores algunas y blancas las que más, que ocultan la vida cotidiana, aunque también sirven para mirar sin que nos vean...

Ventanas las hay de muchos tamaños y épocas, pero la ventana de nuestra alma es única, capaz de no pasar jamás de moda...Por ella llegamos al mundo exterior con todas sus sensaciones, por ella nos sentimos unidos a todo cuanto nos rodea...Tras ella vemos pasar las estaciones, los meses y los años...

Os suguiero que cuidéis con esmero la ventana de vuestra alma, no dejéis morir las flores que durante años
fueron vuestro orgullo...
Asomaros a menudo a esa ventana y podréis ver lo que siempre habéis visto pero con renovada ilusión...