Volar

Los humanos somos una rara especie de aves y cada familia habita es su propio árbol, dónde muchos saben volar y llegar a lugares insospechados...
Volar es una necesidad del ser humano, para poder descubrir ese mundo dnde nos ha tocado vivir...
Nuestras alas personales tienen dotes especiales en los sentimientos y emociones...Nuestras alas vuelan en los pensamientos e incluso somos capaces de penetrar en los huracanes de los sufrimientos y salir ilesos...
A menudo nos perdemos en los cielos de la vida, pero tenemos intuición para saber encontrar el nido del amor...

La diferencia

La indiferencia no nos deja ver la diferencia entre lo opaco y la transparencia...
Por vivir indiferentes nos perdemos muchos retos e ideas...
A un reto podemos dejarlo pasar o no dejarlo escapar y aquí están; la indiferencia y la toma de conciencia...

Una mirada, una palabra

Cada mirada tiene un lenguaje, cada palabra contiene un mensaje...
Lo importante es intuir la palabra, que insinúa la mirada y saber comprender el sentido de cada palabra...
Lo emocionante está a lo largo y ancho de la vida, dónde las palabras y las miradas tienen conexión con nuestro interior. Cada instante puede hacernos ver lo poco que estamos en dónde estamos, quizás sea por eso perdernos el contenido de muchas miradas y el sentido de muchas palabras...

Luna llena

Hace frío en esta noche y sin embargo la luna llena nos mira con su rostro desconcertante, igual que nosotros miramos a nuestro coche, que hace rato que se queja.
No sabemos si seguir mirando la luna con su cara nueva o dejar al coche aparcado donde sea...
El desconcierto siempre nos llega y no siempre por mirar la luna, a veces vemos las estrellas.

Círculos

Se habla, se dice, se exprime cada palabra y los hombres crean círculos cerrados, en dónde se estancan muchos pensamientos...
Si no queremos caer en el desaliento, lo mejor es crear en nosotros círculos
abiertos...

Buscar sin encontrar

En el desván de nuestra vida están las dudas de muchos retos y nuestros amores secretos, desde el amor humano hasta por el extraño amor que sentimos por un perro...
En la penumbra de nuestra mente buscaremos las fotos de nuestra vida y quizás nos sorprenda, lo escasas que son las sonrisas, quizás porque en el ayer empezábamos a ser lo que somos hoy...
Conviene detenerse en medio de la penumbra de nuestro desván personal, para revivir sufrimientos y alegrías, para poder acariciar las llagas causadas de tanto andar y buscar sin encontrar...
Es en el hoy dónde hemos aprendido a utilizar la visión y en el desván personal poderla utilizar...

Una vez y nada más

Si optamos por "un ir pasando" la vida nos pasará y nuestra vida no sucede de cuando en cuando. La vida es: una vez y nada más...