Certezas

Somos viajeros del infinito, espectadores del Cosmos, donde las estrellas sugieren la grandeza incomprendida por muchos...
Buscamos abismos, donde anclar nuestros tesoros y certezas y en vez de descender, caemos sin ver donde caemos...
Vamos en busca de horizontes y no nos damos cuenta de que, somos miopes y además no hay visibilidad...
Somos ante todo; humanos con ansias y deseos...
Somos viajeros en busca de todos los imposibles pero, nos olvidamos que, nuestro viaje es solo de ida...

El problema de no tener problemas

Cuando estamos entregados en cuerpo y alma al trabajo o al ocio, el cuerpo deja de ser cuerpo y el alma deja de ser alma, para convertirnos en una especie de máquina sin alma y con el añadido del vacío y la ausencia total de sentimientos y la nula presencia del optimismo...
El mayor problema humano es: no tener problemas...
El problema de la comunicación no nos lleva a una grata conversación porque: El problema está en las idas y venidas, las entradas y las salidas...
El problema del vacío humano, se extiende como una plaga y lo peor es la invisibilidad, no poder hacer arder la llama en el corazón del hombre...
Los problemas, aún siendo problemas, nos hacen sentir vivos, nos llevan a la superación de buscarles solución...
Por comodidad, evitamos muchos problemas personales y ajenos...
El gran vacío del hombre, no habría de ser, por el daño que, el mismo se inflige...
Amar, cuando el amor es imposible, nos hará luchar para sentirnos vivos...

Cualquier lugar

Cualquier lugar es bueno para echar raíces, aunque hayamos dejado parte de ellas en otro lugar...
Eso queda comprobado sobretodo, cuando viajamos porque: sin darnos cuenta nos acoplamos a cualquier tierra...
Estamos hechos para toda clase de terrenos y ni siquiera nos hace falta un techo, lo único que puede suceder es que notemos en falta el reducto personal de nuestra cama...
Somos todo-terreno en los terrenos ajenos y tenemos la gran ventaja de que, allá adonde vamos, van nuestras raíces, sin necesidad de meterlas en la maleta...
Ahí donde llegamos, creamos nuestra personal parcela y encima nos dejamos enraizar en las raíces ajenas...
Estamos hechos para cualquier clase de tierra y nuestra existencia es; florecer allí donde la vida nos lleva...
Lo importante es; mantener la sabia nueva en todos los terrenos de la vida...

¿ Realista o soñador?

No sé que tienes tú, pero tienes algo diferente a los demás...
¿Realista o soñador?
Quizás tu propia realidad te causa temor y te dedicas a soñar, dejándote llevar de lo irreal, cuando estás a un paso de borrar los espejismos...
No creas en el azar porque; el azar no existe...
Si piensas en lo imposible, porque tu propia realidad no te da opciones, aprende la lección de todos los que alcanzaron sus sueños...
En la noche más oscura debes saber que la locura de soñar es; alcanzar ese sueño que te quita el sueño...
¿ Realista o soñador? 
Supera los obstáculos de los prejuicios de tu interior...
Los sueños, no tienen forma ni color, dales tú la forma concreta, sal de ti y encuentra la realidad de tu sueño...

Circulos concéntricos

Una buena dosis de dinamismo y optimismo es exactamente lo que hace falta, para mejorar las estructuras deterioradas de nuestro mundo...
El dinamismo, no es movernos en círculos concéntricos, sino; usar la movilidad y la mente, para alcanzar nuevos retos y uno de ellos  sería; salir de la pasividad, aunque hay otros muchos imposibles de citar en este corto espacio...
El granito de arena, aportado por cada uno, sería capaz de suprimir las guerras y nos llevaría a las latitudes del optimismo...
Hoy, prevalece el pesimismo que es sin duda el mayor peligro de la humanidad...
Desde cualquier lugar, con sabiduría o sin ella, el hombre puede hacer mucho para luchar contra los desastres ecológicos y humanos...
¿Para qué guardar lo que atesoramos: las ideas, la belleza y la habilidad de nuestras manos?
Todo empieza con un paso, aunque nuestra aportación se haga invisible en esa extensa playa del mundo que nos rodea...
El dinamismo es: sinónimo de optimismo y nos implica con la realidad...
El optimismo es: un regalo, una dádiva que se nos da para mejorar ese río que nos lleva: nuestro mundo...

Maravillarse

" Mejor ir solo que mal acompañado"
Los demás, nos arrastran, nos quitan la libertad de contemplar la belleza de un paisaje o un recodo singular...
Los demás, no suelen compartir nuestro gusto personal, solo les urge el plan de su mente y eso si son capaces de pensar...
De un paisaje maravilloso, nos llevan a las luces de neón de un bar y encima nos preguntan ¿ No es maravilloso?
Pocos entienden el arte de maravillarse y extasiarse...
Si tú eres de los que se maravillan, convendrás conmigo que: la soledad es la mejor compañía para compartir con ella los momentos más hermosos...
No es lo mismo mirar que contemplar. Lo de contemplar es un acto muy personal . Mirar es: pasar de largo e ir adonde van los demás... A mi me gusta dejarme perder de vista, para seguir la ruta de lo maravilloso...
¿Y los demás?
Quizás aún permanezcan en la  oscuridad de un bar...

Un bosque imaginario

En la profundidad de ese bosque imaginario que es; la gran ciudad , las luces y las sombras que proyectan los edificios, no tienen desperdicio, son más bien; de gran utilidad, porque imaginamos estar en un bosque de verdad...
Mientras vamos andando, un desierto imaginario, nos lleva al espejismo de un desierto de verdad, porque: en la ciudad, también nos podemos encontrar con el duro realismo de la propia soledad...
La gran ciudad es: dinamismo y dudo que el optimismo se haga palpable...
Muchos corren, sin saber adonde van y otros caminan sin rumbo...
Un gran río plateado de coches, avanza por un cauce imposible de cruzar...
La gran ciudad, oprime y deprime...
El lado bueno de la gran ciudad es que: nos acoge, se estira o se encoge a gusto personal...