Horas y horas delante de una página en blanco a la espera de encontrar una idea y mientras la mente vuela seguimos con la mirada la trayectoria de un planeta. A estas altas horas de la noche no estamos para llenar una página en blanco . Y nos da igual perdernos en el espacio y perder horas de sueño, cuando hemos descubierto un planeta nuevo: el nuestro, que tiene además su propio universo...
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