Un lugar de misterios, donde muchas certezas son dudas y lo que más nos falta es ironía para ver la vida bajo otra perspectiva. Un ejemplo:
Nos invitan a una fiesta de la que no sabemos quienes irán, si habrá cena o nos tendremos que ir sin cenar y aquí ya empiezan nuestras dudas, pero aun hay más: en esa fiesta nos encontramos con más desconocidos que amigos y entre presentaciones y saludos ya nos sentimos perdidos y encima el pensamiento nos pregunta, cuando podremos irnos. También él se siente aburrido.
Estoy hablando de la vida donde todo es incierto y nunca se nos da la seguridad de una respuesta. Lo cierto es, que estamos en esa fiesta y no vemos ni veremos al amigo que la hace y entre tantos desconocidos no hay rastro de los amigos y solo hay un brindis por la felicidad. Nuestra felicidad está en estos momentos por el suelo y solo sabemos pensar en: cómo y cuándo nos iremos...
Aquí hablo de una fiesta pero en la vida, que no es precisamente una fiesta siempre queremos huir de muchas circunstancias...
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