Somos como somos, aunque también podemos ser lo que no somos. La vida es un continuo roce con la incógnita de los otros : o sea: nos pasamos la vida sin ser lo que somos...
La vida es una ensaladera, donde todos estamos metidos y queramos o no lo compartimos todo: nos amamos y nos odiamos, reímos, lloramos, nos mezclamos con otras vidas y ahí recibimos mil sensaciones que nos son desconocidas.
Sin embargo, cada uno de nosotros es un ser exclusivo, tan exclusivo que a veces nos olvidamos de que: vivimos con y por los demás. Nuestro problema es, que somos algo así como un virus, que nos transmitimos unos a otros, se trata del mejor contagio de la historia. La conexión nos une y nos hace más humanos. El efecto ensaladera nos mezcla y hace lo demás...
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