He corrido bajo la lluvia sintiendo el aire frío sobre mi rostro. A lo lejos las luces de la estación parpadean expectantes...Ante mis ojos perplejos contemplo ese último tren que ya no podré coger...Me siento exauta y me siento en un solitario banco...Sé que no puedo sentir desánimo...
Pienso en los que de verdad perdieron su tren, los que dieron su vida, sus ilusiones y aún están en la estación...El haber perdido el tren tiene también cosas buenas, yo por ejemplo he podido contemplar un cielo cuajado de estrellas, un horizonte con luces parpadeantes y sobre todo
he tenido la oportunidad de pensar que mañana pasará otro tren...
Pienso en los que de verdad perdieron su tren, los que dieron su vida, sus ilusiones y aún están en la estación...El haber perdido el tren tiene también cosas buenas, yo por ejemplo he podido contemplar un cielo cuajado de estrellas, un horizonte con luces parpadeantes y sobre todo
he tenido la oportunidad de pensar que mañana pasará otro tren...
Hola mama...no te preocupes que si pierdes el tren siempre te puedo llevar en coche...claro que no veras las estrellas...pero me veras a mi!
ResponderEliminarJa,ja,ja!!!!!
Este escrito, para mi,es el mejor...anímate y continua esribiendo...que nos alegras a todos el corazón!
Querida Isabel...me estoy poniendo al día con tus hermosos pensamientos..Éste me encantó así que lo leí y....sí...es verdad que la pérdida de un tren ofrece siempre otras alternativas y que la esperanza nunca debe morir.
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ResponderEliminarQuerida Isabel...Me estoy poniendo al día de tus hermosos pensamientos...Éste me encantó nada más leerlo...y...sí,es verdad..el perder un tren te brinda otras alternativas y la esperanza no debería de morir nunca.
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