Ponerse en camino...

Al cansancio lo dejamos en todos los caminos, pero a las dudas no las pudimos dejar y en el valle donde vivimos , otros nuevos caminos nos hicieron avanzar...
Ponerse en camino, siempre es lo primero, pero a veces el camino es traicionero...
Lo mejor es sumergirse en la ola de los sueños y dejar, que nos lleve lejos...
Lo nuestro es encontrarnos con otros seres en las encrucijadas de los caminos y compartir con ellos el pan y el vino...

Locos de amor

Podríamos ser locos comprometidos en repartir la locura de la ternura, potenciar el optimismo y llenar de amor los vacíos de nuestro alrededor...

El descanso del alma

En nuestra alma hay una alarma, que no deja de sonar...
Nos dormimos sin dormir y en la leve duermevela, esa alarma nos desvela : una idea que nos llega, un deseo navegando en un barco imaginario y nosotros, ahí , luchando contra viento y marea...
Descansar no tendría que ser una prueba de fuerza, porque nuestra alma donde mejor está es sintiéndose poca cosa...

Las horas

Las horas, que llegan a nuestra vida a veces están perdidas y no nos damos cuenta de que nos dan la visión de muchas lejanías...
Ese camino, que no pudimos andar...
Ese amanecer, que no supimos contemplar...
Ese amor, que no nos supo amar...
Las horas no se pierden , nos sugieren un tiempo para pensar y soñar. Somos nosotros los que las dejamos desvanecer, como se desvanecen las olas del mar...
Las horas son nuestra playa personal, donde encontrarnos a solas con las ilusiones todas y ahí dejarse llevar por esos sueños, que nunca nos atrevimos a soñar...
Hay que ir al encuentro de las horas, no dejarlas pasar, sino buscar en ellas nuestra verdad...

La nube cambiante

El ansia por la felicidad nos lleva a desplazarnos sin límites por el cielo personal...
Muchas nubes que se nos cruzan por los cielos de la vida envueltas en dicha escasean, pero de haberlas las hay...
Como somos una nube buscamos vivir el viaje de la felicidad y es bien sencillo, porque todos tenemos un Universo entero en nuestro interior...
El verdadero peligro está en querer alcanzar otros Universos ajenos al nuestro. Aquí me refiero, no a las metas personales posibles, sino empeñarnos en conseguir imposibles...
Todos somos una nube, todos tenemos un cielo donde movernos y es dentro de él dónde está la felicidad...
Las nubes son cambiantes, como cambiantes somos nosotros y corremos el peligro de salirnos del cielo personal...

Reacciones

La emoción puede ser una sensación reconfortante y aunque hay muchas clases de emociones, la desilusión es quizás la más inquietante, porque va directa a la sensibilidad del ser humano....
Sin saberlo ni quererlo, todos somos poca cosa. Cualquier palabra o gesto, un largo silencio; anula nuestra entereza y fortaleza...
Vivir es una proeza de reacciones complejas y si no usamos bien nuestras reacciones, perderemos ilusiones, sentimientos y emociones...
Toda reacción nos da una doble visión:  la de aceptar o negar la estabilidad de nuestro interior. Teniendo en cuenta de, que muchas emociones son desilusiones...

Cada día es un poema

Cada día es un camino, que nos lleva hacia el ocaso. Cada día es un poema, que a la existencia cantamos y lo mejor del camino es el cansancio, porque en el reposo nos damos cuenta de que solo somos seres humanos...

El sonido de tus pensamientos

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No hables, no digas nada porque el bosque está dormido, solo habrás de ser el mudo testigo del sueño de su verdor...
No hagas ruido con tus pasos, escucha solo el sonido de las olas lejanas deslizandose en la playa...
Cuando el bosque despierte comenzará ese concierto del rumor del viento, donde no puede faltar el sonido de tus pensamientos...
El bosque se despereza y el sol pone en movimiento toda la naturaleza , pero solo tú eres el mayor milagro del bosque entero...
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Un número: doce

Entre un mar de gente o a solas nos será importante cerrar los ojos para sentir ese instante del cambio de año...
No pienses en el número doce, sino imagina el roce de muchas manos unidas, que comparten la dicha del Nuevo Año...
                            Felicidades

Si...

Si la mente continuamente se llena y se vacía, la felicidad siempre se llena de alegría...
La felicidad cuanto más la das, más se multiplica...

Símbolos de amor

El amor de los hombres es el reflejo de un sentimiento nacido del Universo...
Las estrellas dejan destellos de luz, símbolos del amor que hay en ellas...
Los humanos nos guiamos por las estrellas y en nuestro desierto personal, el amor persigue nuestras huellas...
Aunque estemos perdidos y nada tenga sentido, el amor nos da la seguridad y la calidez de un nido...

Nuestras raíces

Somos arboles plantados a lo largo del camino de la vida...
Nuestras raíces son llamas, que buscan ser hogueras y nuestro cielo siempre gira en torno de los deseos y aún siendo árboles de gran altura a nuestra mente le cuesta madurar...
A veces la sequía del desaliento hiere nuestras raíces, otras el viento de las circunstancias, retrasa nuestro crecimiento...
Las tormentas siempre llegan cuando menos lo esperamos y corremos el peligro de no sentirnos humanos...
Somos árboles anclados en la rutina. Nos plantaron en la vida para amar y ser amados...
A igual que los árboles, tenemos un alma y ellos y nosotros convivimos en silencio nuestro destino...

Pasos perdidos

Hoy has decidido, que tus pasos vayan perdidos, sin buscar sonidos...
Bajo tus pies arena blanca y en los ojos la distancia de ese paisaje infinito...
Tus pasos vacilan porque: lo tuyo no es ir perdido, sino seguro de tu camino...

Es Navidad...

La oscuridad se ilumina con la sencilla alegría de poder llenar tu copa y la mía, para brindar por la felicidad...
Entre sorbo y sorbo podremos cantar y dialogar, con la dicha de estar alma con alma en la distancia...
Brindo contigo para, que cada día de tu vida sea siempre Navidad...

Descubridores de resplandores

Nadie tiene tiempo, pero todos queremos recuperar el tiempo perdido y vivir las sensaciones que no hemos vivido...
Sentir emociones y sensaciones es bastante sencillo, es usar a cada instante la mirada de un niño. Esa mirada sencilla y tranquila, capaz de ver maravillas y que si somos demasiado adultos, no podremos ver...
El mayor reto de nuestra vida está en el propio silencio, que nos hace ser protagonistas de sensaciones y emociones ajenas al mundo entero...
Somos los creadores de todas las sensaciones, descubridores de resplandores e interpretes de emociones...
Aunque seamos adultos hemos de volver a ser niños para: reír y llorar, para cantar y soñar, para recuperar el tiempo perdido sin mirar hacia atras y olvidar los números de nuestra edad...
Habremos de ser rebeldes, para ir contra corriente y ser conscientes de que nuestras emociones y sensaciones son diferentes al resto de la gente...
Un niño se ríe aunque no haya motivo, solo por el placer de reír , un adulto ve en la risa una gran dificultad, sino se ríen los demás...

Buscadores de ilusiones

A veces no te atreves a cruzar la frontera de la ilusión, porque tu lugar es mantenerte en donde estás...
Para encontrar ilusiones hay que romper los esquemas de todas las dimensiones personales hay que romper el frío calculador de nuestro interior...

El cielo personal

En el ritmo constante de la mente hay: visiones, emociones y tensiones ( de hecho hay mucho más).
La mente viaja en el tiempo y aunque no tengamos tiempo, la mente elabora todos nuestros pensamientos y almacena conocimientos, pero en contraposición no entiende demasiado de sentimientos...
Como no somos conscientes de muchos vacíos de nuestra mente, nuestra personalidad puede diluirse o dividirse...
La mente manda y ordena y es casi imposible discutir con ella, pues el río que nos lleva nunca deja de fluir...
Lo mejor que tenemos es el alma, un lugar en calma donde encontrar el cielo personal...

Hay cosas en la vida...

El corazón a veces llora "no seas niño", nos dice la mente, pero hay cosas en la vida exclusivas del propio corazón y esta es una sensación muy pocas veces asumida, por eso se vive sin emoción ...

Todos somos navegantes

La vela blanca tenía alma de viajera y su vocación era alcanzar lejanías. Nadie conocía sus sueños, pero ella soñaba y ni siquiera el marinero sabía a dónde le llevaría aquella vela blanca...
Eran los dos soñadores de lejanías doradas, dónde el sol nunca se pone y el amor espera en alguna playa...
En la existencia todos somos navegantes y a lo largo de la vida nuestra vela ya no es blanca, pero somos soñadores y buscadores de lejanías doradas y llevamos  resplandores en nuestra alma...

Seducidos

Nada puede seducirnos cuando todo nos seduce, cuando la vida nos lleva a sentirnos atraidos por todo lo que reluce...
La alegría en la rutina muy pocas veces reluce, pero ella es la que más brilla en nuestra vida...