Todo tiene conexión con la emoción, por eso el ser humano se empeña en conseguir lo que sueña, como si eso fuera solo el fin para ser feliz. La emoción es una sensación, que muchas veces es pasajera y como todo en la vida es una ilusión sin apenas consistencia. Vivir es ya otro tema: una realidad concreta, que está en el corazón , dónde las sensaciones y emociones las vivimos sin que nadie se de cuenta.
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