No sabemos que misterios oculta el corazón, ni sabemos lo que hay detrás de una sonrisa...
En el santuario de nuestra vida, hay silencios del hoy y del ayer y en toda vida siempre hay; un antes y un después...
Nuestro misterio está oculto a la visión ajena y sólo los muros de nuestra alma lo conoce...
Hay que reverenciar al corazón del hombre porque: si pudiéramos penetrar en el santuario de su alma, llegaríamos a comprender el significado del hoy y el ayer de cada ser humano...
En el santuario de nuestra vida, hay silencios del hoy y del ayer y en toda vida siempre hay; un antes y un después...
Nuestro misterio está oculto a la visión ajena y sólo los muros de nuestra alma lo conoce...
Hay que reverenciar al corazón del hombre porque: si pudiéramos penetrar en el santuario de su alma, llegaríamos a comprender el significado del hoy y el ayer de cada ser humano...
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