Un lugar secreto

En nuestra historia personal están; las palabras, los silencios, el amor y el desamor. Una combinación extraña y compleja...
Lo difícil es crear en nuestro interior un ambiente personal, dónde todo se diluya y nada nos influya...

La palabra

Una sola palabra, puede llenar muchos vacíos...
Una palabra es suficiente para expresar lo que sentimos...
La voz humana puede cambiar el sentido de la palabra...
La voz humana es el mejor invento porque: nos dice los sentimientos...

Cerca, lejos...

Continuamente nos acercamos y nos alejamos de muchas vivencias personales...
Nos parece que somos felices, cuando en realidad sólo hemos rozado la felicidad...
Nuestra vida es: tener sin retener...
Evocaremos ese paisaje de un camino entre la arboleda y esa imagen de un instante, se asomará a nuestra mente a lo largo de la vida...

Tu sueño viaja a otros sueños

Cuando cruzamos líneas divisorias nos enlazamos con otros sueños...
Nos convertimos en aves migratorias, hasta alcanzar el lugar de los sueños ajenos...

Aprendiz de emociones

El día de hoy está gris y te sientes agobiado por la visión del gris, que hay en ti..
El desánimo y el cansancio son lugares inexactos, que tu mismo te has creado. Por cierto, cuyo arte es suprimir la fuerza del corazón y ese día gris anula lo mejor de ti...
Sólo tienes que cambiar tu forma de pensar y repetir "soy feliz"...
Quizás el día siga siendo gris, pero no importa tanto el color sino esa frase que te lleva al optimismo...
Estimula sensaciones y busca en tus sueños las conexiones con los deseos...
Conviértete en aprendiz de emociones y cuando aprendas el oficio de ser feliz, ningún día de tu vida volverá a ser gris...

Gestos invisibles

Llegó un día, que la palabra dejó de ser palabra y los gestos humanos se hicieron invisibles...
Cómo no habían abrazos, los brazos se quedaron inservibles...
Comenzamos a buscar a un amor a quien amar, pero como las palabras no existían, sólo nos quedó la soledad...
Las distancias se agrandaron y aún seguimos empeñados en no usar la palabra...

El niño y el mar

Aquella noche que el sueño no llegaba, el niño imaginó una barca varada en la playa...
El sería el capitán que la llevaría en volandas hasta el azul de esa inmensidad, dónde su padre a veces buceaba. La llevaría junto a esas olas que siempre cantan...
Por fin podría dormir y soñar que la inmensidad del mar era su cama...