Buscamos el lugar ideal para sacar una foto...Y ahí, inmóviles intentamos ofrecer a la cámara esa sonrisa que, de tan estudiada es casi ridícula...Tras nosotros, los niños corren, los pájaros vuelan...
Lo nuestro es una inmovilidad que no nos va...
En la existencia todo está en continuo movimiento...Las estaciones del año ofrecen constantemente sus cambios de color...
El escaparate de la vida es, un continuo renovarse...
Sólo el hombre es capaz de permanecer inmóvil en su lugar, sin inquietarse por nada ni por nadie y como transfondo de la vida humana los decorados son cambiantes...
Pero ahí estamos, sonriendo impávidos, sin querer darnos cuenta de lo que hay tras nosotros, ni siquiera nos importa lo que tenemos delante...
Nuestra pose, quedará para la posteridad y nuestros hijos y nietos no llegarán nunca a comprender, cómo fuimos capaces de dar la espalda a tantas cosas que no debieron suceder...
Lo nuestro es una inmovilidad que no nos va...
En la existencia todo está en continuo movimiento...Las estaciones del año ofrecen constantemente sus cambios de color...
El escaparate de la vida es, un continuo renovarse...
Sólo el hombre es capaz de permanecer inmóvil en su lugar, sin inquietarse por nada ni por nadie y como transfondo de la vida humana los decorados son cambiantes...
Pero ahí estamos, sonriendo impávidos, sin querer darnos cuenta de lo que hay tras nosotros, ni siquiera nos importa lo que tenemos delante...
Nuestra pose, quedará para la posteridad y nuestros hijos y nietos no llegarán nunca a comprender, cómo fuimos capaces de dar la espalda a tantas cosas que no debieron suceder...
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