Pon un jardín en tu vida

Haz un hueco en tu trabajo o en la rutina de cada día , crea un jardín y cultiva las flores de la ilusión, riégalas con la pasión de un jardinero eficiente, prescinde de la mente y usa sólo el corazón y veras como anulas la tensión...
Traza caminos, que unan la ilusión con la visión...
Haz una alberca y que su agua te de la transparencia, báñate en ella y deja a tu alma flotar en el azul de su cristal...
Cuando anochezca, atrévete a contar estrellas y llévatelas al fondo de la alberca...
Ya me dirás si esta receta ha anulado de tu mente lo que te hiere...
No te canses de sembrar las flores de la ilusión ...

Nuestra mente al descubierto

La mente asume la función de su elasticidad y da conexión a todas las circunstancias de la vida. La mente, no sólo asume sino, que presume de múltiples saberes y es capaz de asentir y negar...
Nuestra mente siempre va al cien por cien y ahí, no es extraño perder el sentido de la vida...
Ella, a veces nos sugiere y otras, nos ordena de manera, que estamos sumergidos en un río que nos lleva...
La mente tiene conexiones concretas, dónde muchas ideas se quedan obsoletas, para dar paso a las ideas ajenas...
Por lo general , es la gran ausente, porque: actuamos por impulsos, decidimos sin pensar y el boceto de nuestro pensamiento, nunca llega a ser lo que esperamos de él...
Nuestra mente es, un vacío de soledades inmensas, dónde el calculo frío nos quita el calor de las ideas...
La mente puede saber, pero pocas veces se conecta con la sensibilidad y la tibieza de nuestro ser...
Nos engaña, nos enreda en la sutil madeja de este mundo tan complejo y nos lleva a ser lo, que a veces no queremos ser...

Alas...

Nunca pudiste imaginar adónde te llevarían tus alas...
Esas alas eran; sueños de ilusiones y emociones...
Ellas viven en ti, llenan de sentido tu ir y venir. Ellas son: el pensamiento, la superación, los sentimientos...

Soñando...

Seguiremos soñando con los senderos que anduvimos y soñaremos con los senderos que nos quedan por andar...
Soñando, siempre soñando podemos estar perdidos por muchos caminos...
Soñar podemos soñar, sin perder la libertad...

Toda la sabiduría

Cuando creemos saberlo todo, nos sorprendemos de que la sabiduría no haya incluido ese lugar dónde tantas veces hemos pasado sin darnos cuenta, de ese bosque, cuya profundidad parece habernos siempre esperado...
Hoy precisamente, bajo un sol hiriente nuestro coche se ha estropeado y toda la sabiduría no nos sirve...
Ahí estamos, aparcados ante el fracaso...
Cómo lo malo siempre tiene su lado bueno, esta situación nos lleva a la visión de unos árboles centenarios...
La sabiduría puede ser muy buena, pero es mejor la emoción...

Me gusta...

Me gusta la sencillez, me gusta siempre cantar bajo la lluvia que canta, sin perder la ilusión, sin dejar de soñar...

Niños y hombres

La mejor excusa para recibir amor es, sentir frío...
El niño se levantó de su cama a media noche y avanzó por el pasillo. Parecía un pajarito, que lejos de sentir frío, estaba tibio...
La inocencia de los niños no es en realidad inocencia, es más bien la ciencia de la experiencia y el frío es la excusa perfecta. Este frío puede ser un vacío, que hasta los adultos hemos sentido...
No te empeñes en explicar al niño tus razones, porque él tiene muy claro las suyas, él tiene una visión de la vida distinta y por cierto; tú también la tuviste un día...
Lo que pasa es, que los adultos nos olvidamos del frío y de los fríos de la vida e incluso nos olvidamos de lo grato de dormir en compañía ( pero sin niño)...
Soy de la opinión de, que el amor rompe todas las fronteras y por él se cruzan todas las esferas. Los niños y los mayores sólo buscamos el calor, que da el amor del corazón...