Es dentro de la propia familia, donde se ve el papel designado a cada miembro...
La neutralidad personal en medio de la convivencia del día a día con los demás, es sin duda una necesidad para no llevarnos a la profundidad de muchos y variados problemas...
Lo mejor, es quizás la complicidad y la contemplación a distancia de los problemas cotidianos, que son como una especie de laberinto...
El "tienes que venir" "tienes que hacer" ya no es una urgencia, sino una orden muy en boga en las familias...
Si a mi me dicen "lo has hecho maravillosamente" ya me veis bastante descontenta de mi misma, porque no me gusta el protagonismo...
Ahora bien, sigo siendo neutral, obrando siempre con mi corazón, que es una forma de conservación personal...