Con él y sin él

El hombre se ha parapetado en una joya de gran valor...
El móvil sea: grande, pequeño, plano, delgado, con o sin internet, cámara fotográfica...
El hombre, sale a la calle con su armadura móvil y se olvida de que: está en la calle...
Con el móvil, el hombre lo es todo, sin él no es: ni la mitad de lo que es en realidad...

El estandarte de la felicidad

Sin más tierra que tu campo, sin más camino que el tuyo ; ya tienes bastante para, alzar el estandarte de la felicidad...
Todas las secuencias de la vida te llevarán a ver que, la dicha esta escondida en lo profundo de tu ser...
En tu campo florecido, no dejes de recoger, la alegría que te llega con cada amanecer...
Cada día es, el primero de tu vida, donde siempre tendrás mucho que hacer, pero la vida te ofrece constantemente nuevos retos, para que puedas crecer...
En tu alma, mil silencios pueden hacerte dudar...
Ponte la alegría al hombro y comienza a trabajar, para que tu campo florido, no se llegue a malograr...

Saber...

Saber que: aunque no haya luz, somos luz...
Saber, aceptar nuestro destino es: sabernos aceptar tal como somos...

Tu vida llevada al cine

Hoy llevaremos al cine, la película de tu vida...
Tú serás: el director, el guionista y el actor y el comentarista de tu propia vida...
No te hará falta maquillaje, porque: saldrás tal cual...
En tus vivencias personales, mejor no añadir ni quitar nada, porque: la verdad es siempre sagrada...
La película de tu vida, no se pondrá en cartelera, solamente su protagonista podrá verla...
Eso de ver la propia vida en la gran pantalla, tiene sus ventajas...
Te verás en tres dimensiones, comprobarás tus emociones, tus odios y amores, lo que has ganado, lo que has perdido, lo que eres hoy y lo que has sido...
Estoy segura de que te vas a llevar grandes sorpresas, muchos sobresaltos y deseo que en esa película de tu propia historia encuentres muchas cosas positivas...

Me pongo en tu lugar...

Cualquier cosa me viene bien para buscar: una palabra, una sola para dar forma a la idea...
He comprobado que en el hombre, la idea que se pueda tener de él es muy difícil, pero como denominador común el fondo de los seres humanos es casi idéntico...
La comprensión de las carencias humanas, me dejan siempre perpleja...
Las carencias y necesidades del hombre, algunas son: relativas y distintas en cada uno...
La soledad es; por ejemplo una enfermedad muy actual y a la que no se le da la importancia que merece...
Hombres y mujeres, que se levantan al amanecer y salen al mundo hostil del exterior, con el sueño en las pupilas y el cansancio del día anterior...
Y ahí, en la frialdad del amanecer, van enumerando los múltiples problemas de sus vidas...
En plena calle, nadie dice nada a nadie, porque: todos tenemos miedo de todos...
Por eso, en mi blog, es palabras y más palabras...
Me pongo en lugar de muchos, intuyo los miedo y las angustias ajenas, las vivo en el fondo de mi corazón...
Por eso, regalo lo que tengo: la alegría...

Recibid  mi más profundo deseo de: felicidad...

Los mil ojos

Eso de sentirnos mirados por mil ojos y ser contemplados desde todos los ángulos es, desconcertante, porque nunca se sabe cómo y de que forma nos miran y nos analizan...
Como todos somos un raro espécimen para los estudiosos, aportamos con nuestra versión única, sorprendentes descubrimientos, no ya solo para los estudiosos, sino para el mundo que nos rodea...
Tenemos la gran suerte de que, a nuestro corazón nadie puede llegar...
Es difícil saber la pose que se ha de adoptar para que: los mil ojos nos vean en actitud correcta...
La cuestión es: saber adónde vamos, y hasta dónde podemos llegar y aunque nos miren, no dejar de ser lo que somos: un inmenso mar de sensaciones, una jungla llena de colores, un desierto de grandes dimensiones, donde nadie podrá vislumbrar las emociones de nuestro exclusivo lugar...

Un instante de ternura

Aunque nadie nos lo diga, aunque el amor se silencie...
La ternura será: la única fuerza capaz de salvar al mundo...

Cada noche la esperaba, como se espera a un amor y cada noche escuchaba
sus pasos que, se acercaban...
Cada noche, era su beso, un instante de emoción y sus manos en sus manos
le decían sin palabras como sería ese otro amor...
Hoy los años han pasado y la niñez se alejó...
Cuando el niño fue creciendo, la puerta de su alcoba se cerró y el amor de su madre no volvió junto a su lecho...
Pero el hombre, que ya era, noche tras noche esperó...