Muchas veces el todo no es nada porque: el todo es demasiado pequeño, para nuestra ansia de infinito. Es tan solo un punto pequeñito, que no puede llenar nuestra alma...
El todo intenta gobernar nuestra vida, nos enseña su majestad y potestad, pero ese mismo todo no es nada porque: el nuestro, es un paisaje personal inmenso de ideas y pensamientos. El todo es a veces incierto...
Lo poco gana terreno, lo poco se derrama a manos llenas en las certezas del día a día...
Lo poco anda por casa, nos espera por la noche de puntillas y alaba las maravillas de nuestra mente cansada...
El todo intenta gobernar nuestra vida, nos enseña su majestad y potestad, pero ese mismo todo no es nada porque: el nuestro, es un paisaje personal inmenso de ideas y pensamientos. El todo es a veces incierto...
Lo poco gana terreno, lo poco se derrama a manos llenas en las certezas del día a día...
Lo poco anda por casa, nos espera por la noche de puntillas y alaba las maravillas de nuestra mente cansada...
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