Decisiones vacilantes se asoman a nuestra vida y siempre necesitamos el apoyo de otras vidas...
A veces vemos sin ver y apenas aceptamos la fragilidad de nuestro ser, pero siempre hay una mano, que nos levanta al caer y siempre hay otros ojos, que nos ayudan a ver...
Muchas soluciones nos llegan de la luz que hay en los otros y hemos de aceptar nuestra pequeñez total, a expensas de toda la sabiduría personal...
A veces vemos sin ver y apenas aceptamos la fragilidad de nuestro ser, pero siempre hay una mano, que nos levanta al caer y siempre hay otros ojos, que nos ayudan a ver...
Muchas soluciones nos llegan de la luz que hay en los otros y hemos de aceptar nuestra pequeñez total, a expensas de toda la sabiduría personal...
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