Sin pensar ni imaginar nada en concreto, ayer por la tarde cogimos el coche y nos fuimos, rumbo a lo incierto...
El cielo amenazaba tormenta pero, las dos mujeres que eramos, más mi nieta pequeña, íbamos con un cargamento completo de alegría...
En el primer pueblo, nos paramos y como siempre, yo me fui por mi lado, o sea, por el lado opuesto...
Quedamos en un lugar concreto y a la hora convenida...
Cuando se puso a llover, las llamé , pero no me quedaba saldo...
Dejé a la lluvia caer y yo tan feliz, sin saber que hacer...
Cuando al fin nos encontramos, la alegría se mezcló con el agua que caía...
Y aunque no lo creáis, encontramos el lugar ideal para seguir con la aventura de la improvisación...
Bajo un toldo medio caído de un bar estuvimos hasta la hora de cenar...
A veces, las improvisaciones te llevan a sensaciones maravillosas...
El cielo amenazaba tormenta pero, las dos mujeres que eramos, más mi nieta pequeña, íbamos con un cargamento completo de alegría...
En el primer pueblo, nos paramos y como siempre, yo me fui por mi lado, o sea, por el lado opuesto...
Quedamos en un lugar concreto y a la hora convenida...
Cuando se puso a llover, las llamé , pero no me quedaba saldo...
Dejé a la lluvia caer y yo tan feliz, sin saber que hacer...
Cuando al fin nos encontramos, la alegría se mezcló con el agua que caía...
Y aunque no lo creáis, encontramos el lugar ideal para seguir con la aventura de la improvisación...
Bajo un toldo medio caído de un bar estuvimos hasta la hora de cenar...
A veces, las improvisaciones te llevan a sensaciones maravillosas...
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