Es nuestro mar tan pequeño que, su profundidad no puede asustarnos...
En el azul de sus olas las ilusiones vienen y van, acariciando esa playa que, nos tocó en heredad...
Y ahí estamos, en la arena contemplando nuestro mar que es nuestra propia vida...
A lo lejos, nubes rojas, envueltas en ese cielo tan cambiante de los sueños...
A lo lejos, carabelas de blancas velas, buscan un puerto, donde atracar, guiados por las estrellas, de ese cielo de cristal...
Nuestra barca es tan pequeña, como pequeño es nuestro mar y las velas hechas jirones, jamás podrán alcanzar los lejanos horizontes...
Nuestro mar es, nuestra vida, la rutina, la alegría, las lágrimas vertidas, la prosa, la poesía...
¿Para qué, queremos más?
Pon el ancla en tu rutina y la alegría renacerá y tus lágrimas las olas se llevarán...
Sueña de noche y de día, no te canses de soñar, que en la vida, todo es prosa y poesía, esa es la felicidad...
¡Es Navidad, os deseo que, todos los días del año sea Navidad en vuestro corazón!
En el azul de sus olas las ilusiones vienen y van, acariciando esa playa que, nos tocó en heredad...
Y ahí estamos, en la arena contemplando nuestro mar que es nuestra propia vida...
A lo lejos, nubes rojas, envueltas en ese cielo tan cambiante de los sueños...
A lo lejos, carabelas de blancas velas, buscan un puerto, donde atracar, guiados por las estrellas, de ese cielo de cristal...
Nuestra barca es tan pequeña, como pequeño es nuestro mar y las velas hechas jirones, jamás podrán alcanzar los lejanos horizontes...
Nuestro mar es, nuestra vida, la rutina, la alegría, las lágrimas vertidas, la prosa, la poesía...
¿Para qué, queremos más?
Pon el ancla en tu rutina y la alegría renacerá y tus lágrimas las olas se llevarán...
Sueña de noche y de día, no te canses de soñar, que en la vida, todo es prosa y poesía, esa es la felicidad...
¡Es Navidad, os deseo que, todos los días del año sea Navidad en vuestro corazón!
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