En las discusiones y polémicas nunca se alcanza la verdad, porque en definitiva no es la verdad lo que se busca...
Una alabanza nos eleva y una simple humillación nos hunde en la indignación y la tristeza. El amor propio nos da las mayores pobres dulzuras y las mayores pobres tristezas...
La pasión secreta del hombre es la lucha por el reconocimiento ajeno. Lo demás es sólo un medio para esta pasión secreta.
"Triunfamos" en la vida, si los otros reconocen nuestro valer, "fracasamos" sino logramos tal reconocimiento.
Tan pobre es la condición humana que hipotecamos la vida por un aplauso...
No hay comentarios:
Publicar un comentario