Los seres humanos son propensos ha dejar que les pongan un collar, para así, dejarse arrastrar, o bien por las amistades o modas en uso, tendencias y demás...
Hay quien disfruta no sólo en poner el collar sino también el bozal, para que el hombre cazado guarde silencio...
Y el hombre se deja llevar, allí donde le lleven... La fuerza de voluntad se desvanece, como una nube de primavera...Y con la excusa de que la rutina nos ha dejado desmadejados, nos dejamos hacer...Vamos tras lo insólito, lo peligroso, lo nunca visto...
De nuestro collar pende una correa y nos llevan, ¿Adónde?
Amigos, la libertad es única y nuestras palabras no merecen ser acalladas por un bozal.
Hay quien disfruta no sólo en poner el collar sino también el bozal, para que el hombre cazado guarde silencio...
Y el hombre se deja llevar, allí donde le lleven... La fuerza de voluntad se desvanece, como una nube de primavera...Y con la excusa de que la rutina nos ha dejado desmadejados, nos dejamos hacer...Vamos tras lo insólito, lo peligroso, lo nunca visto...
De nuestro collar pende una correa y nos llevan, ¿Adónde?
Amigos, la libertad es única y nuestras palabras no merecen ser acalladas por un bozal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario